Los defectos relativos a la estabilidad y seguridad estructural de un edificio son problemas o imperfecciones en la construcción o diseño del edificio, y que comprometen su capacidad para resistir cargas y condiciones que podrían poner en peligro la seguridad de las personas que lo ocupan.
Plantear una reclamación por defectos de la edificación de un edificio es un proceso complejo, pero es importante hacerlo de manera adecuada para la protección de tus derechos como propietario o usuario del inmueble.
En este artículo vamos a abordar cuáles son algunos ejemplos de defectos, que pueden ser causados por diferentes razones, desde errores de diseño o construcción hasta el envejecimiento de la estructura o daños causados por eventos como terremotos o inundaciones.
¿Cuáles son los riesgos más relevantes para la estabilidad de un edificio?
Estos defectos pueden representar riesgos significativos para la seguridad de los ocupantes del edificio y, en algunos casos, pueden requerir reparaciones costosas o incluso la evacuación del edificio si se considera que la estructura es peligrosa.
- Grietas en las paredes, los cimientos o la estructura principal del edificio.
- Desplazamientos o asentamientos desiguales que pueden causar inclinación o hundimiento del edificio.
- Corrosión de las estructuras metálicas o deterioro de la madera debido a la exposición a la humedad.
- Deficiencias en la resistencia sísmica o capacidad para resistir terremotos.
- Fallos en la instalación de sistemas de refuerzo o soporte, como vigas, columnas o conexiones defectuosas.
- Fallos en la impermeabilización o aislamiento térmico que pueden llevar a problemas de humedad o falta de eficiencia energética.
- Problemas en la calidad del concreto o el acero utilizado en la construcción.
- Diseño estructural inadecuado que no cumple con los estándares de seguridad y resistencia necesarios para la ubicación y uso del edificio.
Es fundamental realizar inspecciones regulares de los edificios y llevar a cabo un mantenimiento adecuado para prevenir y abordar estos tipos de defectos antes de que se conviertan en problemas graves de seguridad.
Además, la construcción y el diseño deben cumplir con los códigos de construcción y las normativas de seguridad aplicables para garantizar la estabilidad y seguridad estructural de los edificios.
¿Cómo se plantea la reclamación por defectos de la edificación?
Este tipo de situaciones afecta tanto a propietarios particulares como a la totalidad de la comunidad de propietarios.
Antes de presentar una reclamación, es importante documentar detalladamente los defectos, a través de la toma fotografías, videos u otros registros que muestren claramente los defectos.
Cuanta más evidencia se tenga, mejor.
Si el edificio es nuevo, es fundamental revisar si existen garantías de construcción o garantías del constructor. Estas garantías pueden cubrir defectos específicos durante un período determinado.
No obstante, es necesario contar con el dictamen de un perito profesional independiente para evaluar los defectos y proporcionar un informe pericial sobre el origen de los defectos detectados e imputar la responsabilidad e incluso una propuesta de solución. Sin duda, esta evaluación profesional puede respaldar la reclamación.
Se debe notificar por escrito al constructor o desarrollador sobre los defectos encontrados, y siendo un proceso que normalmente toma tiempo resolver, es importante mantener un registro de todas las comunicaciones mantenidas.
Nuestros abogados especialistas pueden ayudarte a evaluar sus opciones legales desde el primer momento, y representarle en un proceso judicial si fuera necesario.